miércoles, 7 de noviembre de 2012

LA PACIENCIA parte II

Gloria a Dios en las alturas, y paz a los hombres de buena voluntad.
Hola hermanos en la fe Cristo Jesús; de nuevo con ustedes, en esta entrega le plasmo la segunda parte de la paciencia, es un estudio muy extenso así que concluiremos con esta parte, ya que la paciencia solo Dios la da; y todo ser humano debe pasar un proceso para obtenerla. Esperamos que le llene y puedan conseguir ejercitarla.
Paciencia Demostrada
La mejor manera de visualizar como se ve cualquiera se las cualidades de la naturaleza de Dios cuando se revela a través del hombre es viendo a Jesús. El era todo lo de Dios brillando a través de la vida de un hombre, sin el polvo del pecado para esconderlo. Jesús era perfecto amor; perfecta paz; perfecto gozo....y perfecta paciencia. Y Dios el Padre, como El reveló Su naturaleza a Israel demostró exactamente las mismas cualidades, pero entonces no las vimos en forma humana. Sin embargo, siempre las reflexiones son idénticas, porque ellos son Un Dios.

Y la paciencia no es la excepción. Si quieres visualizar la paciencia, ve a Dio. Y si quieres ver a Dios, busca dentro de las Escrituras. "Estas son las que testifican de El". Y claro que lo hacen. Echemos entonces un vistazo a la paciencia de Dios. Primero, Romanos capitulo dos. Ahí Pablo ha estado sistemáticamente construyendo un caso para la culpa del incrédulo mundo gentil, todo el tiempo llevando a sus lectores Judíos a una esquina, para que cuando ellos empezaran a juzgar a estos que habían tan flagrantemente desechado a Dios, ellos simplemente revelaran su propia incredulidad. Y en el verso tres, El tira la red, y el saca la principal cualidad de dios que ellos están pasando por alto. La Biblia viviente la parafrasea así:

¿Creen ustedes que Dios va a juzgar y condenar a otros por hacer (estas cosas) y pasarlos a ustedes por alto cuando ustedes las hacen también?". "¿No se dan cuenta lo paciente que El está siendo con Ustedes?. ¿O no les importa? ¿No pueden ver que El ha estado esperando todo este tiempo sin castigarlos dándoles tiempo para que se vuelvan de sus pecados? Su bondad es para llevarlos hacia el arrepentimiento.

Oh, la paciencia de nuestro Dios. Mientras que nos sentamos juzgando a otros, nos permitimos estar ciegos a la realidad de que somos culpables o hemos sido culpables de prácticamente todo aquello por lo cual los condenamos. Y aun así, en lugar de maravillarnos de la paciencia de Dios, nos volteamos a devorar aquellos, quienes por la gracia de Dios están en donde nosotros estaríamos. Ah, la paciencia de Dios. Si no fuera por Su infinita paciencia, ¿existirías siquiera el día de hoy? ¿Estarías hoy en el Reino? ¿Cuánto tiempo lo hiciste esperar cuando te llamó? ¿Cuántas veces ignoraste su voz? ¿Con qué frecuencia, aun después de haber oído su llamado, Le hiciste a un lado? ¿Y cuantas veces, si cuantas miles de veces desde que viniste a Cristo te has rebelado en tu corazón y has vivido la vida a tu manera? Amados, Pablo lo acaba de decir. ¿No se dan cuenta lo paciente que El ha sido con ustedes? ¿Qué no les importa?. Acaso no ven que Su paciencia para con ustedes es la muestra que deben seguir para su paciencia con los demás?
¿Y que no ves que muchos de nosotros fuimos salvados sin importar nuestra rebelión, solo para demostrar la paciencia de Dios? Veamos que dice Pablo en 1 Timoteo 1:14-16. De nuevo Ken Taylor lo parafrasea así:
Oh, cuan generoso fue nuestro Señor, porque El me mostró como confiar en El y así llenarme del amor de Cristo Jesús. Que es tan verdadero, y cuanto deseo que todos lo conozcan, que Cristo Jesús vino al mundo a salvar a los pecadores y que yo era el mayor de ellos. Pero Dios tuvo misericordia de mi para que Cristo Jesús pudiera usarme como un ejemplo para mostrarles a todos lo paciente que El es aun con el peor de los pecadores, para que otros puedan darse cuenta que ellos, también pueden tener vida eterna
Tal vez sea por eso que Dios te llamó; para que tú pudieras mostrar Su Paciencia. Y es por eso que Cristo no ha regresado todavía. Por Su increíble paciencia. Lee 2 Pedro 3:8-10. La Biblia amplificado lo dice así:
Sin embargo no permitan que este hecho se les escape, amados, porque con el Señor un días es como mil años, y mil años como un día. El señor no tarda, o retrasa o detiene lo que El promete, de acuerdo a como algunas personas conciben la lentitud, pero El es paciente (extraordinariamente paciente) para contigo, no deseando que ninguno perezca, sino que todos se vuelvan al arrepentimiento.. .pero el día del Señor vendrá
Jesús lleva el desaire aun en Sí Mismo, cuando ellos se burlan de El y dicen "¿En donde esta la promesa de Su Venida?". Ya sea directamente o a través de sugerencias. Los pastores y conferencistas igualmente predican y enseñan y viven como si el no fuera a venir para nada. Y aun así, inclusive su tardanza es nada más que una señal de Su paciencia. El simplemente no quiere dejar a nadie afuera. Cuando todos los que tengan que venir, hayan venido, amados, ¿fíjense bien! Ese día vendrá. Claro que vendrá.
Tu Dios y el mío es el epitoma de la paciencia. Cada respiración de El, refleja la paciencia de Su Espíritu. Pacientemente, El esperó a que nosotros dijéramos "Si". Pacientemente, El perdona, una y otra vez. Pacientemente, El retrasa Su regreso hasta que todos hayan venido. "Consideren lo paciente que El ha sido con ustedes. Y luego empieza a echar un vistazo, como lo haremos ahora, para ver el grado en que reflejas esa misma paciencia en tus relaciones con los demás.

Paciencia Descrita
Esa, entonces es nuestra motivación y nuestra ilustración. Nuestro Dios nos ha demostrado Su infinita paciencia para con nosotros en nuestra salvación, en Su perdón, y en la programación de Su regreso. Debemos ponderar esas verdades cada vez que tendamos a sentirnos impacientes con aquellos que están a nuestro alrededor. Por eso, ¿si a ese muchacho que trabaja contigo le tienes que enseñar la misma cosa mil veces? Ten paciencia. Demuestra a Cristo. Eso no es más de las veces que Dios te ha mostrado algo antes de que empezaras a poner en práctica la paciencia.
¿Y si tu pareja continúa haciendo promesas, pero nunca las cumple? ¿Si sigue sin llegar a tiempo? ¿Si tus hijos te vuelven loca preguntando una y otra vez la misma cosa? Ten paciencia, amado. Ten paciencia. Tan paciente como Dios es contigo. El escucha, El ama, El espera. Y El te dice:
Ahora... quiero que tú liberes mi paciencia a un mundo que espera, que se pregunta, que se preocupa. Un mundo que se vuelve cada vez más impaciente a cada segundo.

Los Principios de Dios Revelados
Ahora veamos por un momento a los principios en la Escritura que surgen cuando vemos la paciencia de Dios y su efecto correspondiente en nosotros. Y mientras lo hacemos, tratemos de aplicar esos principios a nuestra disposición de liberar la paciencia de Dios en nuestros propios mundos.
1- Se requiere un espíritu paciente a todos los que sirven al Maestro. Creo que algunas de las personas más impacientes en el mundo son Cristianas. Nosotros de alguna manera, en lugar de ver nuestro lugar al final de la fila, como siervos, parecemos pensar que como Hijos del Rey debemos tener una clase de pase que nos de los primeros lugares de la fila en el drama de la vida. Si la fila está muy larga en el súper mercado, murmuramos. Si el muchacho detrás de la caja de McDonalds se toma treinta segundos en lugar de veinte para tomar la orden, estamos furiosos. Si la tienda de descuento nos pone en espera cuando llamamos, echamos humo. Si nuestro auto no está listo cuando esperamos, nos enfurecemos y gritamos. Y aun cuando 2 Timoteo 2:24 dice esto:
Y el siervo del Señor no debe andar peleando [discutiendo y contendiendo]. Más bien debe ser amable con todos y con un carácter templado preservando siempre la paz; debe tener capacidad para enseñar, paciente y tolerante y dispuesto a sufrir la ofensa
Templado. Que no sea de pleito. Paciente. Dispuesto a sufrir la ofensa. Oh, que impacto haríamos tú y yo en nuestros mundos si vivimos esta clase de vida. Pero eso no es un traje de superman que nos podemos poner cuando "llegamos" al final de tu peregrinaje. Esa es la vida normal Cristiana para todo creyente. Es una vida de increíble paciencia. Tú y yo debemos tener la paciencia de Job.
2- La paciencia es especialmente necesaria para aquellos que van a dirigir. I Timoteo 3:2-3 describe a un líder de iglesia de esta manera:
Un siervo del Señor debe ser intachable, esposo de una sola mujer, moderado, sensato, respetable, hospitalario, capaz de enseñar. No debe ser dado al vino, ni pendenciero, ni amigo del dinero, sino amable y apacible.
El hombre de Dios que va a guiar a la Iglesia de Dios tiene una serie de responsabilidades que la Escritura deja claro como el cristal. Ellos reflejan su familia, su dominio propio, sus motivaciones para servir, y su paciencia con los demás. El hombre que no puede ser paciente con aquellos en su rebaño, no puede ser pastor. ¿Por qué? El Buen Pastor, a quien él representa, es perfecta paciencia...por eso. Un Pastor debe tener la paciencia de Job.
3- El anciano de la iglesia debe siempre desplegar una cada vez mayor cantidad de paciencia en sus relaciones con los demás. Tito 2:2 lo dice de esta manera: "A los ancianos enséñalos a que sean moderados, respetables, sensatos, e íntegros en la fe, en el amor y en la constancia"
En otras palabras, mientras más viejo te haces, más paciente debes ser. Y en lugar de eso, usamos nuestra edad mayor como una excusa para ser quisquillosos, egoístas, irritables y desconsiderados. La manera de Dios es siempre lo opuesto. ¿Quieres ver la paciencia en acción? Entonces, de acuerdo con el plan de Dios, mira a aquellos que han caminado el camino y vivido la vida por más tiempo. Deben ser sensibles, serenos, tener control de si mismos, y pacientes. Deben tener la paciencia de Job.
4- La mejor manera de volverte paciente es rindiéndote tranquilamente a la presión. Ahora bien, se que estás cansado de escuchar que el Fruto del Espíritu se produce mejor bajo presión. Ya lo escuchamos con respecto al amor. Con respecto al gozo. Con respecto a la paz. Pero es verdad. Y con su descripción de cada uno de estos reflejos del Espíritu de Dios, La Palabra nos recuerda como los liberamos. Permitimos que Dios nos pruebe, y a través de la prueba, cuando de manera natural no podemos estar amando, gozosos, pacíficamente tranquilos, o pacientes, Dios en nosotros lo hace de manera sobrenatural. Por lo tanto, en el proceso, El produce tanto Su naturaleza en nosotros, como Su testimonio a través de nosotros. No solo la paciencia no es la excepción, es probablemente la que se explica más específicamente. Veamos que dice Romanos 5:3-4.
Nos gloriamos en nuestros sufrimientos, porque sabemos que el sufrimiento produce paciencia, la paciencia, experiencia y la experiencia esperanza. Y esta esperanza no nos defrauda, porque Dios ha derramado su amor en nuestro corazón por El Espíritu Santo que nos ha dado.

Hasta la próxima entrega. Shalom

No hay comentarios:

.

.