Que tal queridos hermanos en la fe de Cristo Señor nuestro; muchas veces me pongo a pensar las maravillas que Dios tiene para uno, vemos todos los días los grandes milagros que Jehová como creador a hecho, una de ella es la lluvia, nosotros como estamos en El Caribe, iniciamos lo que se llama temporada ciclónica desde Junio hasta Noviembre, en este período llueve en cualquier momento y más si se aproxima algún fenómeno atmosférico.
En estos días vi como la mano de Dios estuvo presente, cerca de nuestra residencia, a unas 10 o 12 calles se produjo un incendio, que desde mi casa podíamos ver la magnitud del siniestro, un almacén de plástico de cinco pisos cogió fuego, los bomberos trataban de controlarlo ya que cerca quedaban varios negocios, en fin duraron alrededor de 11 horas para tenerlo bajo control.
En el proceso vi como Jehová mandó lluvia, que ayudó a los hombres especializados a controlar la tragedia, y mientras más se intensificaba las llamas, más llovía, era como una lucha entre ambos poderes, esto me enseño que Dios está en control de todas las cosas, así mismo pasa en nuestras vidas. “Yo daré la lluvia de vuestra tierra a su tiempo, la temprana y la tardía; y recogerás tu grano, tu vino y tu aceite”. Deuteronomio 11:14
Cuando tu situación es apremiante, cuando estás envuelto en un incendio; Jehová esta ahí, más cerca de ti, tratando de controlarlo, pero debe dejárselo todo a El, Dios no entra si no le dan permiso. Cristo en esos momento está intercediendo por ti, buscando la manera que el Padre de la Gloria tenga más misericordia y piedad de usted que nos lee. “Sean vuestras costumbres sin avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré” Hebreos 13:5
Jehová está en control todo el tiempo, permitámosle que entre a nuestro corazón a nuestra vida para que reine Jesús, ya que sin Cristo no somos nada Él es el camino al padre, el camino a la justicia verdadera. “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”. Juan 14:6
Cristo está a tu puerta llamando ábrele para que entre a tu vida. Recuerda ¡Jesucristo viene pronto, búscale!. Hasta la próxima mis hermanos. Shalom
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